¿Has conducido mientras hablabas por el móvil?, ¿Cuánto cobras?, ¿Qué hábitos tienes en higiene personal? Cuando una persona nos hace una encuesta, aunque sea por teléfono, aunque no le conozcamos de nada y aunque tratemos de responder con sinceridad, se puede produce el conocido sesgo del entrevistador:
Interviewer bias is the intentional or unintentional prompting by a marketing researcher, which affects the interviewee's response during oral surveys (e.g. personal, face-to-face or telephone interviews). This may lead to distorted results caused for example through (over-) politeness, social acceptability or conflict avoidance.
No obstante, este sesgo no existe en las encuestas online. Leí este verano, en el especial sobre investigación online que publicó la revista de AEDEMO, un muy interesante artículo de Antoni López de TNS. Me llamo la atención una comparativa entre el online y el telefónico de las respuestas a la pregunta "¿Con que frecuencia suele cepillarse los dientes?". Pues bien, los entrevistados online afirmaban cepillarse los dientes con significativa menor frecuencia que los telefónicos.
Este efecto también se observa en los test de conceptos. En el grafico vemos una comparativa entre las dos metodologías sobre la intención de compra de 2 nuevos productos (realizada por Virtual Surveys). En esta ocasión los encuestados online se mostraban menos predispuestos a comprar los productos que los encuestados con entrevistador... ¿Eran más sinceros de nuevo?